El servicio de moldeo por inyección de insertos es un proceso en el que se colocan insertos de metal o plástico en un molde y luego se inyecta material plástico en el molde para encapsular los insertos, lo que da como resultado productos de plástico con insertos integrados. La esencia de este proceso radica en la estrecha integración de los insertos con el plástico, asegurando que los productos tengan las propiedades mecánicas y la funcionalidad requeridas. Las principales ventajas del moldeo por inyección con inserto incluyen mejorar la resistencia estructural y la estabilidad de los productos, reducir los pasos de ensamblaje, reducir los costos de producción y también proporcionar diseños únicos y multifuncionalidad a los productos. Este proceso se utiliza ampliamente en industrias como la automotriz, la electrónica, la médica y más, y ofrece soluciones eficientes para la producción de diversos componentes complejos.